Padres de familia refutan versión de alcalde Diego Miranda sobre situación de banda municipal
El alcalde de la Municipalidad de San José, Diego Miranda, se pronunció recientemente sobre las denuncias públicas realizadas por integrantes de la Banda Municipal de San José, quienes lo acusan de aplicar recortes culturales y de presuntos malos tratos.
A través de una carta dirigida a los miembros de la agrupación y a sus padres, Miranda buscó visibilizar las acciones culturales emprendidas por su administración. Sin embargo, varios padres de familia salieron al paso para refutar el contenido del documento.
Aquí puede ver el contenido de la carta
Uno de ellos fue Jorge Ulloa, miembro del comité de apoyo y de la asociación de la banda, quien presentó pruebas para respaldar su denuncia. Afirmó que los recortes también afectaron directamente a su hija, instructora del Color Guard, quien no recibió su salario desde diciembre de 2024.
Por medio de distintos mensajes dirigidos a funcionarios públicos, Ulloa evidenció que su hija solicitó reiteradamente, de manera respetuosa, el pago pendiente. El primer mensaje fue enviado el 5 de febrero, mediante una carta dirigida a la promotora y gestora cultural del Departamento de Servicios Culturales, consultando sobre el pago. La funcionaria le respondió que debía gestionar la solicitud con otra área encargada. Afirmó, además, que otro compañero instructor ya había realizado la consulta, y le informaron que, por cierre presupuestario, no se habían procesado los pagos de enero, pero que se efectuarían esa misma semana.
El 7 de febrero, al no recibir una respuesta concreta, Ulloa consultó directamente a la Sección de Egresos, desde donde le indicaron que debía comunicarse con Daniel Espinoza, encargado del trámite correspondiente.
El 20 de febrero, recibió una carta firmada por la promotora y gestora cultural, en la que se decía: “Estimados instructores de la Banda Municipal de San José, según varios correos y mensajes por ustedes enviados con respecto al no pago del mes de diciembre, me permito indicar lo siguiente…
El 1.º de marzo, Ulloa se comunicó vía telefónica con Espinoza, quien le indicó que Tesorería ya había sido consultada, y que el problema obedecía a un error de un funcionario que liquidó el presupuesto destinado a esos pagos. Agregó que estaban buscando soluciones.
El 6 de marzo, en una reunión presencial, la instructora y otro compañero fueron informados de que, al no contar ya con el presupuesto del año anterior, se estaban haciendo ajustes al del 2025 para efectuar los pagos lo antes posible. En esa ocasión se les indicó que el pago sería efectuado en un plazo máximo de 2 semanas.
El 18 de marzo, Ulloa realizó una nueva consulta sobre el estado del trámite.
Tras semanas sin respuesta ni pago, continuó insistiendo. Finalmente, el 29 de mayo, luego de múltiples gestiones y de haber trabajado varios meses sin remuneración, se le realizó el pago.
Jorge Ulloa criticó fuertemente la falta de liderazgo y profesionalismo de la Municipalidad, señalando que su hija trabajó sin recibir salario durante más de 4 meses, a pesar de su compromiso con la agrupación. Además, calificó al alcalde como una persona “ignorante, prepotente y sin capacidad”, y responsabilizó su gestión por la situación crítica que enfrenta actualmente la banda.
Una de las cosas que Ulloa respalda con evidencia es la seriedad con la que siempre se le solicitó al alcalde el apoyo económico que él mismo destaca en la carta que siempre estuvo vigente y que "debido a falta de organización de los responsables no se realizó", apuntando como responsable a la dirección de la banda.
Me resulta ilógico cómo este señor alcalde, con el índice de criminalidad e inseguridad que tiene la provincia de San José, decide sacar de circulación este lindo proyecto. He sido testigo de que el apoyo recibido ha sido muy poco, expresó Ulloa visiblemente molesto.
El padre también cuestionó el nulo respaldo económico por parte de la Municipalidad, señalando que los padres han tenido que aportar con sus vehículos, utensilios, mesas, sillas y alimentación para los integrantes, ante la ausencia de logística por parte del gobierno local.
Este señor alcalde nunca se le ocurrió hacer un censo para conocer la realidad de cada participante, agregó.
Padres de familia e integrantes de la agrupación también señalan como presunto responsable a Daniel Espinoza, funcionario designado por el alcalde como asistente administrativo de la agrupación. Aseguran que Espinoza no cuenta con los atestados ni la experiencia necesaria para liderar ese tipo de iniciativas, pues aseguran que forma parte de los mismos tratos al punto de "no importarle" lo que suceda con la agrupación. Además, mencionan que Espinoza solo era un integrante más de la agrupación que "de la nada" paso a tener este puesto.
Este medio intentó obtener una reacción de Espinoza, pero solo mencionó: "Las preguntas referentes a estos temas, deben ser tratados en el debido proceso y ser solicitadas por medio del departamento de comunicaciones".
Este medio ya realizó dicha gestión a las oficinas de comunicación de la Municipalidad de San José.
En su carta, el alcalde Miranda mencionó varias gestiones culturales que ha liderado desde su administración, entre ellas algunas relacionadas con el Festival de la Luz. Sin embargo, cabe recordar que la edición más reciente de este evento fue una de las más criticadas por la ciudadanía.
Se contactó al alcalde josefino, pero no se obtuvo respuesta para que se refiriera a los cuestionamientos.
El pasado 14 de diciembre de 2024, varias bandas participantes realizaron denuncias públicas por supuesta desorganización, malos tratos y retrasos excesivos durante el festival. Una de las agrupaciones, la Mercedes Marching Band, publicó un comunicado expresando su inconformidad, ya que iniciaron su desfile a las 10:20 p. m., cuando gran parte del público ya se había retirado de las calles.
Otra denuncia provino de la Banda Municipal de Acosta, que aseguró haber sido víctima de acoso por parte de la Policía Municipal. Incluso, la directora de danza del grupo relató que un oficial le dijo: “Mire, aquí está el hospital, el psiquiátrico, para que se quede de una vez.”
Estas situaciones también afectaron a otras agrupaciones, como la Banda Comunal de La Fortuna, entre otras.
En su momento, Miranda llegó personalmente a disculparse con las agrupaciones afectadas y aseguró que tomaría medidas. No obstante, este medio consultó a un director de una de esas bandas, quien se encuentra bajo anonimato y señaló que, si bien se convocó a una reunión, esta sirvió para discutir las malas prácticas que se llegaron a realizar dentro del evento.